10 feb 2012

¿Vas a la oficina o te conectas a ella?

Esta semana, sin darme cuenta me he visto en la necesidad de probar el TELETRABAJO. ¿Pero.. ezo kehlokéh?    Vamos, lo que suele llamarse trabajar desde casa enchufándote a tu ordenador con un sistema "remoto".

Lo que viene siendo Telecurrelar
Bien es verdad que yo soy una persona que "trabaja para vivir" y no al revés, y traerme trabajo a casa me da picor, pero también es cierto que los tiempos cambian. Las tecnologías nos hacen evolucionar si o si, y yo, que hasta hace poco no tenía Facebook ni Smartphone, hoy me veo blogera y con una retaíla de redes sociales a mis espaldas que pa' qué os voy a contar... (véase Contacto jejeje)

La conciliación de la vida laboral y familiar es un monstruo de dos cabezas que intenta sobrevivir a base de darse mordiscos la una a la otra. No puedes dejar de trabajar porque tu trabajo te hace ser tú y da de comer a tu familia, pero tampoco puedes dejar a un lado tu familia porque dependen de ti y de tu presencia. Incluso en familias más desahogadas que tienen a alguna chica de apoyo en casa, la presencia de los padres sigue siendo insustituible.


Es verdad que la sociedad ha avanzado en los últimos 8 años notablemente. Aún me recuerdo los jueves a las 20.30h en la oficina con un ajetreo idéntico al de las 11 de la mañana, y hoy a las 16h te suenan los grillos mientras cierras el ordenador... hay vida después del trabajo...

Por otro lado también es verdad que la mentalidad de la empresa está cambiando. Se está pasando del control al trabajador por presencia física a un modelo en el que se valoran los resultados y la responsabilidad del empleado, y si a esto unes las "benditas" (con cuidado el término) TIC's, la cosa cambia, ya que facilitan la ausencia física en el trabajo.

Pero al grano. Gracias a una gripe infantil y a una ausencia abuelítica (más que justificada y nunca reprochada), ahí que me ví yo el miércoles, tirando del TeamViewer  y de portátil para "ir a la oficina". (Para ser sinceros, eché en falta mi fondo de escritorio zen, pero consume muchos recursos, y no era plan...)

Cronologiando la película (versión libre por confidencialidad):

9:00h Aviso telefónico al empleador/a

Tras intentar buscar una alternativa y ver que no la hay, se te hace la hora... y llamas...
- Jefa! que no puedo ir a la oficina, tengo la cosa torcía de fiebres intantiloides y la abuela se ha dao a la fuga! Menos mal que puedo conectarme en remoto y trabajaré durante el día aquí... ok?
- Nada, nena, nada... puedes hacer videoconferencias?
- Of course, que me manden el Webex al Hotmail y pa'lante!

9.20h Webex iniciado

Instalo Webex, me uno a la Videoconferencia (vc en adelante, como en los contratos), saludo al resto del equipo y se me cuela en el plano una carita de 4 años ojerosa y despeinada, cleenex-escurriendo-mocos en mano, que saluda con toda confianza y habla gangosa... pero vamos! robarme el plano a mí!

9.30h. Telecurrelando

Se ve pequeña la letra, porque el escritorio remoto no coge toda la pantalla del portátil, pero para eso el Sr. Gates inventó el zoom de Windows... 120% va bien, consejo que os dejo... Pues ahí ahí eché dos horitas, hasta que empezó la vc real con los jefes.

11.30 VC Oficial

Pues eso, que os quedáis con las ganas de saber sobre qué, que es confidencial... jejeje... Dos horitas ahí, al pie del cañón... y en estas que el Dalsy hace efecto... la hemos liao: la carita ojerosa está espabilada y se aburre.

Aparece y desaparece del plano por detrás de tu silla, te trae juguetes, se asoma a la vc y saluda con la manita, tiene hambre, sueño y pipí... y tú aguantando con el micro off y hablando por lo bajini... "...dame 5 minuticos, princesa..."


13.30h Itadakimash!! (Buen provecho en japonés)

La cría tiene hambre, venga, yo también!! Aún queda tiempo para echar una horita más antes de recoger a Chicho Terremoto de la guardería.

16h Calma Tensa

Con la llegada del figura, recoges los apichusques y te dedicas a ellos. Merienda, baños, etc... O eso, o te rompe el portátil, y ahí sí que se pone feo...

22h. Al tajo de nuevo

Con las fieras durmiendo echo otro ratico más... pero relajada, en silencio... chill out... Misión cumplida...


Tras esta prueba a trompicones del asunto en cuestión, llego a la conclusión de que el Teletrabajo tiene sus ventajas e inconvenientes, como todo en la vida, pero quizá merezca una oportunidad... No creo que sea adecuado un teletrabajo 100%, ni tampoco la presencia física diaria: creo que un híbrido sería lo ideal: uno o dos días a la semana presenciales y el resto en casa, con unos objetivos a cumplir y apelando a la responsabilidad del empleado (que la tiene, solo es cuestión de valorar y motivar).

Por otro lado, necesita de un imporante esfuerzo de separación del trabajo/casa, porque el hecho de que estés allí a las 10 de la mañana no implica que la lavadora o hacer la cama tengan prioridad... Creo que hace falta una disciplina propia para distinguir lo que hacer a una hora u otra.

Hay que atreverse, simplemente...

Suerte a los que lo intenten, y enhorabuena a los que lo hayan conseguido!!!


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